Pizarra independiente: la politización de la justicia y los casos Garzón, Gómez de Liaño, Ruz y Elpidio Silva

Ver vídeo de la Pizarra independiente en este enlace

"¿Justicia independiente? Sólo en caso de milagro". "A quien no interesa que funcione la justicia es a los partidos que actualmente están en los diferentes gobiernos de España"

"Que la justicia sea independiente es una quimera o es fruto de héroes", afirmó el presidente de la Confederación de Partidos Independientes (CAPI) y de Unión por Leganés (ULEG), Carlos Delgado, en su sección de Pizarra independiente, dentro de la XI Tertulia Ciudadana Cambia Madrid de Canal 33, emitida el miércoles 10 de diciembre, en directo, de 21 a 23 horas, desde el plató del Restaurante La Estación de Los Porches.

Delgado explicó el enorme grado de politización de "las tres grandes patas de la justicia": Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), órgano de gobierno de los jueces y magistrados (decide nombramientos, traslados, expedientes...), el Tribunal Constitucional (TC), órgano de la cúspide de la justicia; y el Ministerio Fiscal que debe promover el cumplimiento de las leyes.

"Los tres están contaminados por la mano de los partidos políticos, por eso, en España, la justicia no puede ser independiente", dijo el presidente de CAPI, que lo argumentó:

El CGPJ cuenta con 20 miembros o vocales: a diez los elige el Congreso y a otros diez el Senado. En ambas cámaras "están los diputados elegidos por partidos políticos". Por tanto, dependen directamente de los partidos.

El TC cuenta con 12 miembros: 4 elegidos por el Congreso, 4 Senado, 2 CGPJ y 2 Gobierno.

El Ministerio Fiscal o el Fiscal General del Estado: "Es una estructura jerárquica, elegida por el Gobierno de la Nación". Por lo que recibe órdenes directas del Gobierno, en este caso, de los políticos del PP.

"Si el CGPJ está determinado por los partidos, el Tribunal Constitucional contaminado por partidos (PP, PSOE, IU y nacionalistas) y el Fiscal General por el Gobierno... ¿cómo puede haber justicia independiente?", se cuestiona el edil independiente.

Cuestiones peliagudas

"Cuando un juez toca la médula de la política, los partidos buscan arrinconarle, destituirle o echarle", indica, y recuerda que los vocales del CGPJ podrían ser elegidos por los propios jueces -y no por los partidos- pero una ley de 1985, durante el gobierno socialista de Felipe González, lo impidió.

Hay cuatro casos llamativos:

"Al juez Gómez de Liaño se le ocurrió investigar al señor Polanco, dueño y magnate del grupo Prisa, tan vinculado al Psoe que se le llamaba Prisoe, y cuando quiso meter más la nariz, Gómez de Liaño fue juzgado y condenado por prevarización. Años después, cuando ya estaba fuera de la judicatura, tribunales europeos sentenciaron que no tuvo un juicio justo".

El exjuez Garzón: "Se metió en 2009 con temas que molestaron al poder, como fue el caso Gurtel. A día de hoy, no hay nadie condenado por el caso Gurtel, salvo el señor Garzón por unas supuestas escuchas ilegales. El propio investigador es el único condenado".

Elpidio Silva: "En el caso Caja Madrid, el juez Silva se metió con la mano derecha de Aznar, un banquero de peso. Ahora, Miguel Blesa está en la calle y el que está fuera de la carrera judicial por prevaricación es el propio investigador, el ya exjuez Elpidio Silva".

Juez Ruz: "Ha empezado a instruir de una manera que no gusta al PP y se ha encargado el CGPJ de decirle que tiene tres meses para acabar el trabajo ya que vendrá su señor y le quitará su sitio".

"La fórmula de elección de los órganos de gobierno de los jueces es vergonzosa y ha pervertido lo que dice la Constitución: estos órganos tenían que ser elegidos por las 3/5 partes del Congreso y Senado con lo que toda esta gente sería independiente. Sin embargo, se ha creado sistema de cuotas en el que los partidos se reparten los vocales", finalizó Delgado.